La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carretera afirma que solo los airbags frontales han salvado más de 50.450 vidas entre 1987 y 2017. Son vidas suficientes para llenar un estadio de béisbol de las grandes ligas. Los airbags frontales, así como los laterales, están diseñados para desplegarse en colisiones moderadas o graves. Se sabe que se despliegan incluso en colisiones leves. Además, los airbags son dispositivos de seguridad suplementarios que deben utilizarse junto con los cinturones de seguridad, no en lugar de ellos; sin embargo, pueden causar lesiones, ya que se activan muy rápidamente (en un abrir y cerrar de ojos) y pueden tener consecuencias graves o mortales si el conductor o el pasajero se sientan demasiado cerca o son golpeados directamente por el airbag cuando éste se despliega por primera vez. Por lo tanto, deben ser sustituidos inmediatamente después de un accidente por un concesionario de automóviles autorizado antes de volver a conducir su coche. Hay muchas fuentes que sustituyen los airbags por otros falsificados o defectuosos o que no los instalan adecuadamente. Esto es muy peligroso. Estos dispositivos de seguridad vitales pueden causar lesiones en lugar de prevenirlas. Algunas lesiones de airbag pueden ser devastadoras, dejando cicatrices y desfiguración que pueden afectar negativamente a la vida de uno. Algunos de estos resultados pueden ser:
- Lesiones oculares. La pérdida de visión o incluso del propio ojo puede producirse por un impacto total del airbag desplegado o al entrar el ojo en contacto con los productos químicos utilizados para fabricar el dispositivo.
- Lesiones dentales. La fuerza con la que se despliega un airbag es suficiente para romper una mandíbula o aflojar o arrancar un diente.
- Lesiones faciales. La cara puede sufrir fracturas de huesos faciales y quemaduras químicas que causan importantes cicatrices. Estos tipos de lesiones suelen requerir amplias cirugías reconstructivas.
Las lesiones por desfiguración del airbag pueden ser indemnizadas por el dolor y el sufrimiento físico y emocional resultantes. La víctima puede reclamar cualquier pérdida relacionada con las lesiones, como pérdida de confianza, pérdida de trabajo y de ingresos, pérdida del disfrute de la vida y reducción de la calidad de vida.Es imprescindible que usted o su ser querido se pongan en contacto con un abogado especializado en lesiones inmediatamente después del accidente, incluso antes de ponerse en contacto con su seguro, si es posible. Un abogado capaz y con experiencia le dará el asesoramiento que necesita para tratar con su seguro y obtener la indemnización que necesita y merece. El abogado determinará si tiene derecho a un acuerdo/indemnización y, en caso afirmativo, cuál debe ser la cuantía para su caso concreto. Algunos datos a tener en cuenta son los siguientes:
- Localización de la cicatriz o desfiguración. Las cicatrices visibles tienen más probabilidades de recibir indemnización que las que pueden ocultarse fácilmente bajo la ropa.
- La edad de la víctima. Es probable que recibas más indemnización si eres más joven, ya que vivirás un periodo más largo con la desfiguración que una víctima de más edad.
- La gravedad de la cicatriz y si es permanente. Se concederá una indemnización mayor si no es probable que la cicatriz prominente desaparezca o mejore con el tiempo.
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